Action Comics #1

Curiosa combinación la que elaboró el guionista Grant Morrison para su primer número en "Action Comics". Todo lo que leemos en este comic tiene la doble cualidad, aparentemente contradictoria, de que se siente icónico, históricamente conocido, pero a la vez nuevo, cada cosa con una pequeña vuelta de tuerca.

De esta forma, muchos de los elementos que uno imaginaría en primer lugar al pensar en un comic de Superman circulan por estas páginas, pero no de la manera en que uno se lo imaginaría.

Por ejemplo, en la escena inicial del comic está Superman actuando contra un villano, pero este no es un pequeño ladronzuelo ni un ser superpoderoso, sino que es un gran empresario que comete grandes robos de esos que casi nunca se revelan y mucho menos se pagan ante la justicia; y el héroe lo entrega a las fuerzas de la ley, pero estas lo persiguen a él, ya que lo ven como una amenaza. Y como ese ejemplo, varias cosas: el lugar donde vive Clark Kent, así como su trabajo actual, la relación que esto trae aparejado con Lois Lane y Jimmy Olsen, el rol que cumple Lex Luthor, etcétera.

Otra cuestión incorporada por Morrison que suma al aspecto icónico pero ligeramente modificado que tiene todo este comic, reside en lo que notan en Bleeding Cool: aparentemente, el autor escocés estuvo mirando al menos las portadas de la colección original de "Action Comics" para crear su versión de la serie. Se vale de aquellos cómics míticos, los incorpora a su narración y a la vez que nos hace un guiño a nosotros y a la historia del comic, permanece fiel a Superman y al "Action Comics" original.

Retomando el primer ejemplo de la escena inicial, es notable el hecho de que este joven Superman que apenas comienza su carrera superheroica, se ocupe de los grandes villanos sociales y defienda a los desprotegidos por los poderesosos. No sólo es una visión del personaje que me interesa personalmente y que también refiere a la etapa original de "Action", sino que además es atractiva para el análisis: hablamos de un joven con poderes, cuya primera preocupación es la justicia social, demostrando una gran cuota de idealismo y de consecuente oposición al estado de cosas establecido. Sin lugar a dudas, quiero leer más de este Superman. 

Todo esto está plasmado en el papel mediante una narrativa dinámica, tanto en lo que respecta a guión como a dibujo (de Rags Morales), redundando en una secuencia de constante acción que hace justicia al título de cabecera, lo cual resulta en una lectura verdaderamente entretenida que nos conduce a uno de esos finales bien superheroicos, que incitan a seguir leyendo.

Deteniéndonos un poco más en el trabajo de Rags, es de destacar la expresividad de todos los personajes que pueblan este comic, especialmente en Superman por la obvia razón de que es el protagonista y por ende quien más aparece; y más aún, el notorio cambio que hay de Superman a Clark Kent, ambos lucen verdaderamente diferentes entre sí, y es un poco más que tener o no un par de anteojos puestos.

Por último, y volviendo a Morrison, se nota que el escritor sigue empeñado en su especie de cruzada por los cómics de superhéroes que dejen de lado la oscuridad exagerada y muchas veces innecesaria, y sean más superheoericos, justamente.

Esta somera enumeración de hechos son lo que hacen que "Action Comics #1" sea un comic que disfruté, y del que quiero leer sus próximas entregas para ver más y más de este trabajo.