The Flash #1

Flash (Barry Allen) fue uno de los personajes más afectados por el relanzamiento del Universo DC. Para ser sinceros, Geoff Johns venía entrometiéndose en su continuidad desde antes, añadiéndole un pasado trágico en la historias de sus padres relacionado con Reverse-Flash, y este nuevo comienzo sólo resultó la oportunidad justa para aplicar más cambios a su vida sin tantas explicaciones internas a la ficción. Es así que ahora Barry es un hombre soltero, sin mucha experiencia con sus poderes, además de que no hay menciones a otros velocistas (nada de Jay Garrick ni Wally West, aunque puede que sean incorporados en algún momento... y ni siquiera Kid Flash parece tener relación con él, si tomamos como cierto lo que se dice en "Teen Titans #1").

No obstante esto, este nuevo volumen de "The Flash" está muy relacionado con el anterior y puede afirmarse sin ser atrevido que hay una continuidad directa entre uno y otro. Desde luego no hay continuación de las historias, ya que están empezando nuevamente las aventuras del velocista escarlata; pero sí hay una clara continuación temática, en el tono de la narración y en el tipo de conflictos que afronta, además de la obvia continuidad visual por mantener al mismo equipo artístico: Francis Manapul y Brian Buccellato. El guionista, sin embargo, no es el mismo ya que Geoff Johns partió con sus ideas a otros sectores del Universo DC. Quien escribe, o mejor dicho quienes escriben, son los propios Manapul y Buccellato, que beben directamente de la manera de escribir al personaje que tuvo Johns en el pasado volumen y por tanto su Flash es muy parecido al del mentado guionista.

De esta manera, en este primer número de la serie vemos como se siguen valiendo del pasado del personaje para desarrollar historias, ya no de sus padres ni de su niñez sino de su temprana juventud y de un amigo de entonces. Asimismo, el aspecto de policía científico está muy presente en este #1, con Patty Spivot tomando un rol de co-protagonista además de interés romántico, lo cual no significa que Iris West desaparezca sino que muy por el contrario también ocupa un lugar importante en este primer comic.

Con un guión, una historia y un tratamiento de personajes correctos, lo que sobresale es la parte visual de "The Flash", en donde mejor se mueve Manapul coloreado por Buccellato. Sin lugar a dudas, al tener también el rol de escritores tienen más libertad y posibilidades para poner el dibujo en función de la historia y viceversa, produciendo un comic visualmente notable, algo que suma mucho a su disfrute y valoración. Desde luego, una de las series que más me interesan de estas nuevas 52.