Vigilante #5 - Deathtrap (2º parte)

Segunda parte del crossover Titans/Teen Titans/Vigilante, continuando casi desde donde dejó la primera parte que se publicó en "Titans #12". No es exactamente de donde terminó ese cómic porque comienza, al igual que aquel, con una breve escena del villano de la historia presentándolo a los que no sabían quien era él y mostrando como continúa con su plan a quienes sí leyeron la primera parte. Cabe reconocerse, que con este cómic mejora mucho "Deathtrap" a como venía siendo hasta ahora (con la previa y la primera parte), tal vez por dejar rápido las introducciones e ir a los hechos, metiéndose de lleno en el nudo de la historia, sin detenerse mucho en prólogos y mostrando más acción. Al menos, así es mejor que antes.

Además, el cómic en sí es bueno por el hecho de valer como cómic individual, favoreciendo el progreso de la historia del crossover, a la vez que se cuenta una historia del protagonista de la serie que puede leerse por separado (aunque claro, sin entender la trama grande que lo enmarca) y se avanza en las subtramas propias de este título que se vienen desarrollando desde el inicio del mismo. Es justo y acertado que así sea, para no hacer sentir obligados a los lectores de "Vigilante" a leer el resto de los cómics del crossover.

Es muy bueno al mismo tiempo que el guionista de la serie, Marv Wolfman, además de seguir desarrollando la que es su última creación, también puede jugar con una vieja creación suya, Jericho, pero con la notable variación de que hoy por hoy es un villano totalmente loco decidido a asesinar a todos los Titans (una motivación demasiado obvia y redundante). Lo creó como un héroe y ahora puede guionarlo como villano, en un estado mental comprometido: no se si estoy conforme con esta visión de Jericho, pero reconozco que es bueno que el guionista que lo escribe en esta situación sea su propio creador, e igualmente entendible es que esté en su estado de locura después de todo lo que vivió.

Porque, en efecto, Jericho tiene mucho espacio en este número de "Vigilante", mucho más que el pasado número de los "Titans" y posiblemente también más que en el próximo número de la historia, dejándole la mayor parte de su caracterización y desarrollo al propio Wolfman. Y a la vez, esto tiene sentido para la serie regular individualmente, porque Jericho es el principal objetivo de Vigilante desde que comenzó la serie.

Siguiendo con lo bueno, que efectivamente esta vez supera a lo malo, es innegable que está bien estructurado el crossover, logrando muy bien las relaciones entre las series: el anterior concluía con Vigilante para invitarnos a leer este cómic de su serie, y este termina con los Teen Titans en una situación inquietante para que leamos el cómic que sigue en el crossover ("Teen Titans #70") y una última página dedicada por completo a Vig para que no nos olvidemos qué serie es esta y saber que él tiene su propia historia fuera de "Deathtrap", y que por cierto es una muy interesante, cada vez más. Tal vez, a fin de cuentas salga muy fortalecida del crossover, con más lectores en su haber y con un trasfondo muy rico con los Titans y Teen Titans, además del propio trasfondo que ya es atrapante y muy bien manejado por Wolfman, imprimiéndole suspenso por doquiera.

Si quisiera notar los puntos negativos de este cómic, tendría que hablar del dibujo, del cual no se hizo cargo el artista regular de la serie Rick Leonardi, y parece que buscaron reemplazo improvisado: lo dibujaron Tom Lyle y Scott Hanna, uno bocetando y el otro haciendo los acabados, con un resultado no del todo bueno.

Pero prefiero no ir por ese lado y quedarme con lo bueno de "Vigilante #5", que es la mayor parte de él, siendo un buen cómic de la serie; en cuanto a "Deathtrap", va mejorando pero prefiero esperar a ver cómo sigue antes de hablar de ella.