Battle for the Cowl #2

Segunda entrega de la miniserie que definirá al nuevo Batman y si bien en gran parte la historia sigue como era de esperar, hay algunas cosas que comienzan a resultar chocantes que demuestran que Tony Daniel no es un buen guionista, o bien, que hubo cambios en algunos personajes que sucedieron fuera de escena y, por ende, no nos enteramos. Pero me estoy apresurando y es mejor ir por partes.

Con el número anterior, la primera entrega de "Battle for the Cowl", mi comentario era mayoritariamente positivo, alimentando de esta forma las expectativas que tenía por el desarrollo de la serie. Por estas altas expectativas es que puede haberme resultado un poco decepcionante este #2, o no, y lo es porque tiene errores de importancia o, por lo menos, errores aparentes hasta ahora. Voy a los hechos. Jason Todd, debajo de la capucha del Batman pistolero (y no es spoiler decirlo), aparece caracterizado como un asesino psicópata, dispuesto a matar a cualquiera que se le interponga en su camino, que no es para nada como lo vimos con anterioridad. Jason sí quebraba el mentado código de Batman de no asesinar, pero a quienes mataba eran "los malos": vendedores de drogas, matones, etc. En este cómic, lo vemos intentando matar a dos personajes importantes a los cuales, siguiendo su comportamiento visto hasta ahora, no debería querer ver muertos.

Ante esto, se me ocurren tres cosas: un cambio profundo en la psique del personaje, sea porque se dio cuenta de todo lo que vivió (lo cual bien debería atormentarlo y alterarle su mente) o porque se jokerizó de alguna manera (recuerden que el Joker está desaparecido), ambas cosas detrás de escena entre "Robin #183" y "Battle for the Cowl #1"; segundo, una decisión editorial de modificarlo volviéndolo villano en lugar de antihéroe sin que medien explicaciones internas a la historia; o tercero, lisa y llanamente, un erróneo abordaje del personaje por parte del guionista Tony Daniel, permitido por sus editores. Particularmente, espero que sea algo de lo primero, o cualquier otro tipo de explicación interna de por qué actúa de esta forma inapropiada para él.

Siguiendo con lo negativo de este cómic, roza lo bizarro la aparición de Black Canary y Huntress, que no tiene ningún sentido ni razón de ser y pareciera que aparecen únicamente para cumplir con un cupo femenino mínimo o porque Daniel tenía ganas de dibujarlas. Por otra parte, también algo molesto y que deja pensando, es la cuestión del enfrentamiento entre Two-Face y The Penguin, que si lo pensamos están también totalmente fuera de lugar considerando sus últimas apariciones, siendo extraño volver a verlos como jefes mafiosos después de mucho tiempo sin que, otra vez, se nos explique como llegaron a serlo.

Una cuestión de los villanos de "Battle for the Cowl #2", y ahora pasando a la parte positiva, es la relativa al grupo que actúa detrás de escena sin que nadie, ni los Batmanes, Nightwing y sus aliados, la policía o los dos mencionados "jefes" villanos, los noten en absoluto. Este punto ya es bueno, pero es mucho mejor que se le dé un rol prominente a personajes que estuvieron sin aparecer en roles de relevancia por un tiempo, dando lugar a que se luzcan verdaderamente. Aquí sí hay que reconocer el acierto del escritor (o de quien sea) en la elección de personajes.

Otro punto positivo es el dibujo de Daniel que, aunque haya detractores intransigentes que digan que es un patético dibujante, en esta miniserie está dando todo de sí cumpliendo una tarea muy buena, con imágenes espectaculares y también, ahora sí, buscando utilizarlas bien como medio narrativo, hasta diagramando de manera original sin afectar la comprensión de la lectura. No digo que el trabajo de Daniel sea perfecto, pero sí que las críticas que se le hacen me parecen exageradas.

Por lo demás, como ya se djio, la historia se desarolla en gran medida como era de esperar, con los combates de Nightwing y el Batman pistolero y más adelante entre los dos Batmanes vistos hasta ahora, una conversación entre Dick y Alfred que inclinan la cosa hacia donde todos creemos que se decantará la resolución, los villanos detrás de escena haciendo de las suyas mientras quienes deben vigilarlos se pelean entre ellos y, por supuesto, preparación de subtramas para el futuro, cuando comiencen las series regulares del universo Batman en junio.

Y debo aclarar que es "en gran medida" como se esperaba porque este cómic comporta algunas sorpresas que generan, relativas al Batman con pistolas y a esos dos personajes a los que ataca, que en cualquier otro momento no serían motivo de intranquilidad porque sabríamos que todo se resolvería para bien, pero siendo un batievento de esta magnitud podemos esperar que haya víctimas de importancia, dejándo pues con la incertidumbre y con el deseo de ver como concluye todo, para lo que lamentablemente falta un mes y medio (para el 20 de mayo se anuncia el #3).

En fin, si hacemos un balance e intentamos una conclusión general, lamentablemente nos quedamos con lo negativo ya que en verdad es bastante chocante y no logra contraponer, en esta balanza ficticia, a los puntos buenos del cómic. Por lo tanto, "Battle for the Cowl #2" me proporcionó un mal trago por las mencionadas cuestiones que me resultan negativas y también por la falta de claridad en cómo se resolverá todo, lo cual no es malo para la historia pero sí es molesto (en un buen sentido) para el lector. Y de esta forma, aunque no tenga tantas esperanzas de que sea un gran cómic, deseo con todas mis fuerzas que llegue pronto el #3 de la miniserie para saber cómo termina.