Action Comics #886

Este número de "Action Comics" es inusual, lo cual no implica ni que sea bueno ni que sea malo. Sucede que Rucka y Trautmann cuentan la historia de Nightwing y Flamebird en su origen legendario, o religioso para los kryptonianos creyentes, pero lo hacen utilizando principalmente prosa acompañada por las imágenes y globos de diálogo que siempre solemos ver en un cómic; lo que dije, inusual.

Este formato hace que la lectura de este cómic se extienda más de lo normal, ya que requiere mayor atención y tiempo, lo que tampoco es malo, sólo lo menciono. Reconozco que más de una vez durante la lectura de estas páginas me pregunté a dónde querían llegar los autores contando esta historia de leyendas kryptonianas y dudé de su elección para el guión, pero en las páginas finales todo cobra sentido, haciendo que esa secuencia que nos lleva a la última página se disfrute mucho más y la entendamos en mayor profundidad. En pocas palabras, perdón Rucka y Trautmann por dudar de ustedes.

Pero además del final, creo que con esta historia (y la comprensión de varias cuestiones que entrega) se ponen en marcha otras tramas que deben ser necesariamente abordadas; me refiero en particular a la Phantom Zone, que debe ser repuesta tarde o temprano.

De cualquier manera, dicho eso, lo inmediatamente importante es la mentada secuencia final que me deja con auténticas ganas de leer más de esta historia, que aunque sea la menos relevante (en apariencia al menos) para la saga de New Krypton no deja de ser interesante.

Pasando al co-feature de Captain Atom escrito por James Robinson, la historia que nos cuenta aquí el guionista británico toma un rumbo aún más curioso que el que ya tenía; el autor no deja de sorprenderme con cada entrega, lo que es muy bueno en verdad. También quiero leer más de esta historia, que lamentablemente está muy cerca de su final para dejar al personaje irse hacia otro proyecto que en este número se insinúa en un recuadro. Además de esto, Robinson ofrece una interesante explicación sobre el plano mágico del Universo DC en toda su extensión, que reúne con bastante sentido muchos aspectos del DCU que de otra manera quedarían inconexos. Y jugando con eso, nos lleva al final que me deja deseando más...

Para concluir, merecen ser destacados los nombres de los artistas que participan en este número: Pere Pérez, Fernando Dagnino y CAFU. Todos ellos realizan una notable tarea, cada uno en lo suyo y cada uno con su estilo, pero todos de primer nivel.