Batman and Robin #8

Este es el cómic de "Batman and Robin" que todos esperábamos, aquel que contiene (¡finalmente!) revelaciones sobre el cadáver de Batman que hemos visto desde "Final Crisis #6" hasta hoy, pasando primero por "Blackest Night", para llegar finalmente aquí. Y ahora, quienes ya leímos este #8, sabemos de quién es ese cadáver; desde luego que no lo voy a decir para no arruinar nada a nadie, ya que esta revelación es uno de los motivos principales para leer el cómic.

Pero no es esa la única razón, siendo el trabajo creativo de Grant Morrison y Cameron Stewart uno de los mejores que se pueden ver en los cómics de superhéroes de la actualidad. El  guionista, por un lado, cuenta una historia que es bastante simple y lineal (al menos a primera vista), pero que a la vez es perfectamente entretenida y cautivante, con una espectacular escena de acción, un villano británico que añade un poco de humor, y un final sorprendente que nos deja grandes signos de interrogación en la cabeza, esperando el próximo capítulo de este arco argumental (que por suerte se publica en dos semanas).

El dibujante, por su parte, lo hace muy bien en la narrativa dinámica de la escena de acción que es prácticamente el centro del cómic, y en la diferenciación de los personajes que podrían traer confusiones por sus similutdes en la apariencia, sólo por mencionar lo más destacable. Son también notables las expresiones de los rostros, que en varias ocasiones hacen innecesarias las palabras.

Entonces, sumamos un muy buen guión de Grant Morrison, un excelente trabajo visual de Cameron Stewart, una revelación sorprendente y un final aún más impactante; el resultado de eso es igual a un cómic de superhéroes cercano a la perfección, aún con su aparente simpleza.